En la última década, el mercado asiático de los deportes electrónicos, o esports, ha crecido de manera exponencial. Si lo deseas puedes visitar 1xBet España, que es el mejor portal para apostar en esports y otras geniales disciplinas.
Incluso, ha llegado a convertirse en uno de los pilares de la industria global del entretenimiento digital. Desde Corea del Sur hasta China y el Sudeste Asiático, los esports han pasado de ser una actividad de nicho a una verdadera fiebre colectiva. Esta incluye diversos elementos, tales como:
- millones de seguidores;
- jugadores profesionales;
- ligas internacionales;
- múltiples torneos locales;
- y por supuesto, un ecosistema de apuestas en línea que no para de expandirse.
Ahora se explorará cómo esta actividad ha cobrado enorme protagonismo en esta parte del mundo.
El núcleo mundial de la disciplina
Asia es, sin lugar a dudas, el corazón del mundo de los esports. Corea del Sur fue uno de los primeros países en profesionalizar el sector, lanzando juegos como StarCraft en la década del 2000, como puedes leer más aquí https://extraconfidencial.com/noticias/por-que-el-continente-asiatico-se-ha-vuelto-una-potencia-en-el-mundo-de-los-esports/. Estos eran transmitidos en televisión nacional y tratados con la misma seriedad que los deportes tradicionales. Hoy en día, China ha tomado la delantera en cuanto a volumen, inversiones y número de jugadores. Se estima que más del 50% de los ingresos globales de los esports provienen de Asia, y solo en China hay más de 400 millones de espectadores ocasionales o habituales.
Este crecimiento ha sido impulsado por varios factores. En primer lugar, la penetración masiva de internet de alta velocidad y la accesibilidad de los teléfonos inteligentes han democratizado el acceso a los videojuegos. En segundo lugar, la cultura asiática, especialmente entre los jóvenes, está muy alineada con la competitividad digital y la socialización en línea. Finalmente, los gobiernos de varios países han comenzado a ver los esports no solo como una industria lucrativa, sino como una herramienta de diplomacia cultural, generando políticas de apoyo y financiamiento.
Paralelamente al crecimiento del mercado competitivo de videojuegos, ha surgido otro fenómeno: las apuestas en esports. Así como sucede con el fútbol o el baloncesto, muchas personas ahora apuestan en línea a los resultados de partidas de League of Legends, Dota 2, Counter-Strike o PUBG. En Asia, donde las apuestas deportivas tradicionales ya eran populares, este nuevo formato ha sido adoptado rápidamente.
Cómo funciona todo esto
La mecánica es similar a la de otros deportes. Los apostadores eligen partidos, predicen resultados o eventos dentro del juego (por ejemplo, qué equipo hará la primera baja, cuántas muertes se producirán en una partida, quién ganará una serie al mejor de cinco, etc.). Luego, ellos colocan su dinero en función de las cuotas ofrecidas por las casas de apuestas. Y si hablamos de cuotas, en 1xBet también encontrarás peleas boxeo para apostar junto a la posibilidad de ganar enormes premios.
Algunas plataformas incluso permiten apuestas en tiempo real mientras se desarrolla el juego, lo que incrementa la adrenalina y el compromiso del espectador.
En países como Filipinas, Tailandia, Vietnam y Malasia, las apuestas en esports se han vuelto increíblemente populares entre los jóvenes. Las razones son varias: el entusiasmo por los videojuegos, la posibilidad de ganar dinero de forma rápida y la facilidad de acceso desde dispositivos móviles. China, pese a tener restricciones estrictas sobre el juego, también ha visto surgir formas alternativas de apuestas. Una opción que se ha vuelto enormemente popular es el comercio de skins, que tienen un valor monetario y son utilizados como moneda de cambio.
En términos más generales, el mercado de esports y las apuestas relacionadas seguirán creciendo en Asia. Las cifras no mienten: millones de personas se conectan cada día para ver torneos, seguir a sus equipos favoritos y, en muchos casos, apostar. Las grandes empresas de tecnología, entretenimiento y apuestas están invirtiendo sumas millonarias en infraestructura, patrocinios y plataformas digitales para captar a esta enorme audiencia.
En definitiva, el fenómeno de los esports en Asia no solo refleja una transformación en la manera en que se entiende el deporte, sino también una evolución en los hábitos de consumo digital. Las apuestas, como parte de este ecosistema, seguirán formando un componente clave. La región asiática no solo lidera el presente del gaming competitivo, sino que, con toda probabilidad, también marcará su futuro.